La IBBC es una iglesia bautista independiente, que cree en la soberanía de Dios y en la responsabilidad del hombre, evangelista, cesacionista, dispensacionalista. Aquí, un resumen de nuestros estatutos de fe:
Creemos en un Dios, uno y solo uno, que se ha manifestado como Padre, Hijo y Espíritu Santo. Al mismo tiempo, ese Dios existe en tres personas diferenciables pero no independientes (1 Juan 5:7; 1 Timoteo 3:16).
Creemos que la Biblia es la Palabra de Dios para la humanidad. Creemos en la inspiración, preservación y suficiencia de las Escrituras (Juan 10:35; 2 Timoteo 3:16; Hebreos 4:12).
Creemos en JesuCristo, en su encarnación y nacimiento virginal. Creemos que JesuCristo fue Dios manifestado en carne, y ahora es Sumo Sacerdote intercediendo por los creyentes. Creemos que volverá a establecer su reino sobre la tierra (Juan 1:1; Juan 1:14; Actos 1:11; Colosenses 2:9).
Creemos que es deber de los creyentes predicar o evangelizar a otros acerca de la fe en el Señor JesuCristo para salvación (Mateo 28:19; 1 Pedro 2:9).
Creemos que la salvación es por la gracia de Dios por medio de la fe. Que ninguna obra nos puede hacer aptos para la salvación. Creemos que el hombre debe arrepentirse de sus pecados y creer en el sacrificio de JesuCristo en la cruz para el perdón de sus pecados y tener la vida eterna (Actos 3:19-20; Efesios 2:8-9).
Creemos que los creyentes deben ser bautizados en las aguas por inmersión. Que el bautismo es una ordenanza para los creyentes, no para los infantes, que muestra la buena conciencia del creyente ante Dios (Mateo 28:19; 1 Pedro 3:21) .
Creemos que aquellos que ponen su fe en JesuCristo son bautizados por el Espíritu Santo en la Iglesia y que todo creyente debe añadirse a una iglesia local. Creemos que Dios quiere que todos los hombres sean salvos.
Creemos que la administración de la iglesia local es a través del pastor o pastores, los diáconos, y la asamblea de la iglesia (Actos 20:28; 1 Corintios 12:13; Hebreos 10:25; 1 Timoteo 3:1-13).
Creemos que el creyente es santificado por el Espíritu Santo en el día de su salvación, pero que debe seguir santificándose progresivamente a fin de agradar a Dios (1 Corintios 1:2; 1 Pedro 1:16).
Creemos en el castigo del infierno y el lago de fuego para aquellos que rechazan la salvación ofrecida en el sacrificio de JesuCristo (Mateo 25:46; Revelación 20:14-15).
Creemos que la Iglesia será arrebatada a los cielos antes que venga el día de Jehová. Creemos que el mundo pasará por un período de tribulación. Creemos en el reinado milenario de Cristo sobre la tierra y la instauración divina de la Nueva Jerusalén (1 Tesalonicenses 4:15-17; Revelación 20:4; Revelación 21:1-2).